Durante al menos dos décadas, este delicioso líquido ámbar ha reposado junto a algunas de las reservas más antiguas de Cuba. Inmerso en los sonidos de la ciudad de Santiago de Cuba, espera a estar listo para bailar en cada copa.
Una exquisita combinación de aromas frutales, resultado del añejamiento del aguardiente en barricas de roble blanco, que hace posible estas agradables características aromáticas. En boca se siente robusto y suave, donde conserva un equilibrio y una armonía entre lo dulce y lo seco. Nos evoca tonos de café, cacao y chocolate. El sabor es audaz pero mantiene una elegancia agradable y semiseca. Notas de cacao oscuro e intenso, café y roble, integrado a la perfección, se abren paso en el paladar y ofrecen un prolongado final.
Esto es historia destilada, un regalo a nuestra ciudad, la magia embotellada de nuestros Maestros. Para honrar su hogar, han creado un ron especial con un alma más musical que el resto. Gracias a los conocimientos que corren por sus venas, transmitidos de generación en generación sin interrupción desde el siglo XIX, nuestros Maestros capturaron el espíritu de nuestras calles. Es un ritmo eterno y antiguo a la vez.
Se trata de un producto exclusivo creado a partir de una pequeña selección de barricas en uno de los almacenes más antiguos de Cuba. Rinde homenaje a la ciudad de Santiago de Cuba, cuna del ron ligero cubano, en sus 485 años de fundación. Como todas las variantes de Ron Santiago de Cuba, el Extra Añejo Gran Reserva 20 Años cumple las estrictas leyes y normas cubanas para la producción de ron. Esto asegura que la calidad más alta se mantiene a lo largo de todo el proceso de producción.
Carlos Acosta nació en La Habana en 1973 y estudió en la Escuela Nacional de Ballet de La Habana en Cuba. Después de varios galardones, Carlos se convirtió en bailarín profesional de las compañías más prestigiosas del mundo, y el Royal Ballet de Londres se convirtió en su hogar.
Su condición física, el puro placer de bailar y su enorme capacidad para transmitir emociones inspiraron a una generación de bailarines de todo el mundo. Su conmovedora historia y los obstáculos que ha superado hablan por sí mismos.
Para crear un ron con un equilibrio sin igual como el del Extra Añejo Gran Reserva 20 Años, se necesita pasión y dedicación, algo que Carlos encarna a través de años de dominio de su arte como bailarín. El ballet es reconocido universalmente por su equilibrio y refinamiento y exige una pericia, un compromiso y una práctica formidables; la sinergia perfecta con el arte excepcional de la fabricación del ron cubano.
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